Todos los años, UNESCO establece un tema de reflexión para celebrar el Día Mundial del Agua. En 2017, la propuesta es «aguas residuales» para hacer hincapié en su reducción y reúso, en tanto fuente potencialmente asequible y sustentable de agua, energía, nutrientes y otros materiales recuperables.
En el marco de un acto organizado por la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación para presentar el Informe Mundial de UNESCO sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos de las Naciones Unidas, titulado «Aguas residuales: el recurso no explotado», Víctor Pochat –presidente del Instituto Argentino de Recursos Hídricos– dialogó con Arg Cap-Net acerca de este tema.
Asignaturas pendientes
Según Pochat, Argentina no sólo debe reflexionar sobre el tema de aguas residuales, sino también encarar otras problemáticas relacionadas con agua y saneamiento que son claves para el desarrollo del país.
“Por un lado, todavía tenemos un gran déficit en la provisión de agua potable para la población y una carencia aún mayor en saneamiento. Este tema es prioritario y está relacionado con la necesidad de tratamiento de las aguas residuales, a fin de que éstas no lleguen a los cursos y cuerpos de agua y los contaminen, con el riesgo de no poder reutilizarlas”, señaló el experto.
Luego hizo referencia a los fenómenos extremos. “Nos preocupamos mucho por las grandes inundaciones que nos han afectado últimamente, como lo ocurrido en Comodoro Rivadavia. Pero también tenemos que pensar en las sequías y prepararnos para afrontar ambos problemas. Argentina es un país mayormente árido y semiárido donde la escasez de agua es permanente. Incluso en la pampa húmeda sufrimos extremos de sequías que afectan la producción”.
Por último, mencionó el riesgo de sobreexplotación de acuíferos para riego. “Es un tema relevante, no sólo en el oeste argentino, que tradicionalmente se abastece del riego para la producción, sino también en la zona húmeda y subhúmeda donde el riego complementario está adquiriendo cada vez más importancia como factor para aumentar la producción. Esta situación generalmente trae aparejada la utilización no planificada de agua subterránea, lo cual constituye un problema muy grave y una asignatura pendiente, que consiste en conocer y monitorear los acuíferos para evitar problemas de sobreexplotación”, subrayó.